(hey, type here for great stuff)

access to tools for the beginning of infinity

Visita a Renovo: cómo construir bicicletas con madera noble

Es difícil imaginar una bicicleta moderna, suficientemente ligera y resistente, con cuadro confeccionado con madera noble. Es lo que el ingeniero Ken Wheeler, antiguo diseñador de aeroplanos como el Wheeler Express, lleva años haciendo en Renovo Design LLC.

Las bicicletas diseñadas por Renovo no son un mero producto romántico, sino vehículos serios y “respetados y mimados por nuestros clientes”, nos explicaba Wheeler durante nuestra visita a la tienda de esta pequeña empresa en Sausalito, pintoresca localidad portuaria al pie del Golden Gate, en la bahía de San Francisco.

Fabricando bicicletas de madera con altas prestaciones

Con la ayuda de su hijo y un pequeño grupo de entusiastas, Renovo Design LLC ha perfeccionado en los últimos años la fabricación de bicicletas de madera noble en un pequeño taller-factoría localizado al norte, en Portland, Oregón.

El resultado: bicicletas serias, que pueden ser mantenidas en perfecto estado durante décadas, usando técnicas de ebanistería. “Básicamente, una bicicleta de madera, si es mantenida con criterio, puede durar siglos, como ocurre con los muebles nobles que han sido protegidos de humedades y plagas”, explica Wheeler mientras su simpático perro Elwood, que da nombre a uno de los modelos de la marca, contemplaba la escena.

Dado el precio de los modelos ofrecidos por Renovo, así como el de las versiones que la empresa confecciona para la alemana Audi, Wheeler cree que las bicicletas de madera de calidad no son una solución para las masas.

Micro-factorías: ventajas de pensar y producir en casa

No obstante, Renovo demuestra que es posible fabricar bicicletas en Oregón, no sólo diseñarlas, y obtener un control del producto que reporta beneficios a la empresa, así como reconocimiento por haber logrado mezclar técnicas de alta tecnología con un profundo conocimiento artesanal de la madera.

Preguntamos a Ken Wheeler si, en un momento tan complicado para crear empleos en Norteamérica y Europa, la salida es crear negocios en la frontera entre la tecnología y la artesanía, con una pequeña producción personalizada de productos de calidad: “es complicado unir artesanía, tecnología y fuentes sostenibles de materiales y procedimientos”.

“Pero nosotros creemos en ello. Nuestro próximo paso es lanzar un modelo con madera noble local, de modo que la materia prima también sea de la zona. La presión para producir más barato en otro lugar se esfuma cuando tus clientes entiendes que, a veces, merece la pena pagar por lo que quieres por adelantado y conservarlo para toda la vida”.

Menos productos y mejores, en lugar de su renovación constante.

Visita a la tienda de Renovo Bicycles en Sausalito, San Francisco

Aprovechando nuestra estancia navideña en San Francisco, contactamos con Wheeler y nos invitó a visitar la tienda. Sausalito, una antigua localidad pesquera y de trabajadores de una antigua base militar ya cerrada, se ha convertido en el último medio siglo en una pequeña -y cara- ciudad de 7.000 habitantes, que conserva un cierto aire bohemio.

Eso sí, ahora las casas flotantes habitadas por resistentes de la contracultura sesentera convive ahora con casas de alto standing con vistas al Golden Gate hacia el oeste, el interior de la bahía al este y, al sur, San Francisco.

Llegamos a la tienda de Renovo siguiendo la carretera que bordea los muelles de Sausalito; apenas una pequeña tienda con unas bicicletas de madera aparcadas en el exterior, frente a una con puerta y escaparate acristalados que permiten ver las bicicletas dispuestas en soportes sobre el suelo y las paredes del interior, de unos 50 metros cuadrados.

Simpleza rústica intemporal y prestaciones actuales

Todos los detalles, desde los materiales usados en los vehículos hasta los complementos expuestos en el escaparate, o la tipografía usada en la marca “Renovo” impresa sobre el cristal, tienen un aire clásico, intemporal, con un cierto halo años 50.

Tras saludar a Wheeler, que viste del modo casual del Pacífico Noroeste (viejo chalejo deportivo Patagonia, suéter polar, tejanos azules y zapatos de trekking), el aire romántico cincuentero se esfuma tras un rápido vistazo a las bicicletas y los complementos: el producto es serio y no hace falta ser un especialista para advertir la alta tecnología involucrada en fabricar los modelos Renovo.

Al rato de estar charlando con Wheeler, un par de entusiastas de la bicicleta (casco, gafas de sol aerodinámicas, maillot, medias y zapatillas de ciclista) entraron en la tienda.

La suavidad de la madera vs. la rigidez del metal o el carbono

Era la primera ocasión que acudían al establecimiento y experimentaron una reacción similar: los cuadros de madera noble no son toscos trozos de tronco trabajados a la manera rústica, sino una pieza finamente pulida con el interior horadado, para reducir el peso y aumentar la velocidad del vehículo.

Todo ello sin restar las principales ventajas de la madera cuando es usada en una bicicleta: “su conducción es más confortable; una experiencia radicalmente distinta. Cuando alguien prueba una bicicleta de madera, despierta su espíritu crítico con respecto a otros materiales”.

Si la madera es un material cuya vibración molecular aumenta la comodidad de la conducción, ¿por qué se impusieron primero el acero y después el aluminio y la fibra de carbono como materiales preferidos para fabricar el cuadro de la bicicleta moderna?

La dificultad de trabajar la madera

Wheeler respondió tajantemente a esta pregunta: simple y llanamente la madera es un material bello y adecuado, pero pesado, costoso y difícil de producir en cadena. La madera noble no es un material fácilmente adaptable a las economías de escala.

Renovo ha sabido sobreponerse al primer y último escollos: ha reducido el peso de sus modelos usando una tecnología propia que permite horadar una estructura de madera noble tubular sin dañar la estructura. “Sin la tecnología de corte de precisión actual, sería imposible hacer cuadros de madera noble tan finos, ligeros y resistentes”.

Gracias a la técnica de horadado de precisión empleada en su taller de Portland, Renovo ha logrado que incluso Audi se fijara en sus bicicletas y, confiando en la calidad del producto, propusiera a la pequeña Renovo vender conjuntamente tres modelos bajo la marca del fabricante automovilístico alemán: Audi Duo City, Sport y Road.

El precio de los productos locales y de calidad

El otro escollo, el precio, permanecerá. Pese a que el proceso está muy automatizado, el fundador de Renovo reconoce que producir cada bicicleta es un complicado proceso semi-artesanal.

Obtener la madera más robusta, cuyo rendimiento es similar al del aluminio y la fibra de carbono, es caro, sobre todo si procede de explotaciones locales con certificación de sostenibilidad, el siguiente objetivo de Renovo, para así fundir todavía más el carácter de Renovo en el Pacífico Noroeste: equipo, diseño, producción, valores y, cerrando el círculo materiales.

Los visitantes espontáneos que interrumpieron nuestra charla con Wheeler se sorprendieron al ver un modelo de bicicleta de paseo colgado en la pared, con los característicos cuatro anillos de Audi. “¿Es ese el logo de Audi?”. Respuesta de Wheeler: “Sí. Audi acudió a nosotros y nos preguntó si nos interesaba vender nuestras bicis bajo su marca”.

La siguiente pregunta de uno de los visitantes fue, en tono coloquial: “¿La marca alemana de coches? ¿Estás de coña?”. Risas.

Resolviendo el dilema del innovador

Ken Wheeler y su equipo, en el que su hijo Stuart toma cada vez más responsabilidades, van en serio. Han logrado resolver el “dilema del innovador” de un modo similar que Steve Jobs y Jeff Bezos: centrarse en el diseño de la estrategia y el producto a largo plazo y olvidando los “mandatos” del corto plazo, siempre relacionados con circunstancias cambiantes y coyunturales.

Primero, diseñar un producto con maestría y pasión. A continuación, tras alcanzar el nivel de expertos, apostar con dinero propio en la idea. Finalmente, aparecen los modelos de bicicleta, cada vez más mejorados. “Hasta que un día una marca de prestigio viene a picar a tu puerta, interesada en lo que haces”.

Mientras charlábamos con Ken Wheeler, recordé haber mencionado en un artículo reciente a una pequeña empresa familiar española cuyos paralelismos con Renovo me impulsaron a citar.

Un ejemplo español de artesanía tecnológica: Los Tres Juanes

Se trata de Los Tres Juanes, una pequeña empresa andaluza intergeneracional especializada en carpintería de armar.

La firma elabora un producto de madera único: artesonados que rivalizan los de los maestros medievales del arte mudéjar. Para ello, conjuga conocimiento ancestral (basado en la práctica y el profundo aprendizaje del arte de la ebanistería) con las últimas tecnologías (diseño y creación de prototipos por ordenador, herramientas de precisión, etc.).

Un producto, en definitiva, bello, difícil de producir en cadena, con una respetuosa clientela internacional, y difícil de deslocalizar. Ken Wheeler se mostró interesado por la empresa española. 

Sin duda, los emprendedores europeos podrían aprovechar más la tradición artesanal y unirla con las herramientas tecnológicas cada vez más baratas que permiten producir a pequeña escala sin perder rentabilidad. “Hasta ahora, ello no era posible”.

El renacimiento de los productos de calidad

Ken Wheeler es consciente de que el futuro de la bicicleta no es la madera noble por varias circunstancias, entre ellas el precio. Pero, al aumentar el interés por los productos bien diseñados, intemporales, imperecederos, locales y con un toque personalizado o artesanal (o ambas cosas a la vez), se consolida el mercado para “excepciones” de calidad como las bicicletas de madera Renovo.

Otro amante de las bicicletas, el veterano modisto inglés Paul Smith, lamenta el declive del oficio de artesano, entendido como el profundo conocimiento del oficio, fenómeno especialmente sangrante en los países ricos, donde supuestamente es demasiado caro producir bienes capaces de competir con los que se fabrican en las grandes factorías de los países emergentes.

Paul Smith y su preocupación por la artesanía

Smith lamentaba en una entrevista el tejido industrial que ha perdido Gran Bretaña (el fenómeno sería extensible al resto de Europa y a Norteamérica) en las últimas décadas.

Smith diseñó una bicicleta para conmemorar el 60 aniversario de la marca inglesa Mercian Cycles, aunque la bicicleta tiene para él un significado más profundo. Supone rememorar la época dorada de la producción industrial todavía semi-artesanal, llevada a cabo por pequeñas compañías especializadas que producían modelos seriados de calidad.

Mercian Cycles

Mercian Cycles, que opera una legendaria tienda en Alvaston, sigue produciendo entre 300 y 400 cuadros al año, usando siempre acero y adaptando las dimensiones a cada cliente. Fundada en 1946, la empresa se salvó de la desaparición cuando fue traspasada a Grant Mosely y Jane Mosely, ambos diseñadores y trabajadores de la marca.

Paul Smith no sólo tiene varios modelos Mercian, sino que ha ayudado a la marca a elegir los colores de sus modelos.

Salvando las distancias y los materiales empleados, el negocio de Renovo es más similar al de Mercian que al de cualquier otro fabricante de bicicletas que diseñe sus modelos en la sede, pero fabrique el producto en cualquier factoría situada en un país emergente, para aprovecharse de las economías de escala. 

Gana la “eficiencia” mal entendida; pierden el producto, el medio ambiente, el tejido industrial tradicional y, sobre todo, el cliente.

Emprendedores apasionados de sus productos

Producir como la firma de ropa técnica Patagonia, la firma de artesonados andaluza Los Tres Juanes o la empresa de bicicletas inglesa Mercian Cycles no es, cree Ken Wheeler, un producto romántico del pasado.

Hay clientes que demandan este tipo de producto (consultar artículo Vuelven las bicicletas de madera: 10 modelos high-tech), obtenido con métodos de fabricación que no se adaptan a las economías de escala. Y, tarde o temprano, florecerán más empresas dispuestas a arriesgarse para suplir la demanda.

Es algo que no se enseña en las escuelas de negocio. Se aprende a lo Yvon Chouinard, Paul Smith o Ken Wheeler: fabricando con pasión, sin olvidarse nunca de la calidad del producto. Del compromiso del fabricante con lo que ofrece su empresa.

Tras una agradable velada en la que aprendimos mucho aplicación tecnológica a la producción artesanal y percibimos la pasión de un fundador por el producto que ofrece su empresa, nos despedimos de Ken Wheeler y volvimos a San Francisco.

Es difícil pensar en la bicicleta del mismo modo tras visitar tiendas como la de Mercian o Renovo.