Este análisis en primera persona llevado a cabo por un desencantado profesional liberal de éxito, el periodista canadiense Carl Honoré, pone en tela de juicio el culto a la velocidad contemporáneo, que se convierte en estándar social en todo el mundo.

¿Qué hace un experimentado y serio periodista, capaz de publicar sus trabajos en medios de comunicación del renombre de The Economist y The Guardian (semanario y diario, ambos británicos), elogiando la lentitud? ¿Se ha vuelto loco? ¿Ha abrazado algún tipo de confesión espiritual radical? ¿Ha cambiado sus ropas por seda natural y ha dejado el periodismo?

Quien se acerque a Elogio de la lentitud: un movimiento mundial desafía el culto a la velocidad, apercibirá que Carl Honoré, el autor y periodista en cuestión, dista mucho de haberse vuelto loco.

Hayamos o no oído hablar de las personas, movimientos y asociaciones que predican una vida en la que todo pueda hacerse en su “tempo giusto” sin por ello renunciar a nada, el libro describe unos síntomas que nos resultarán familiares.

Prisa, trabajo, correos electrónicos a medio contestar, citas informales y desayunos de trabajo, momentos cronometrados con la pareja y la familia, éxito derivado de la demostración de una agotadora eficiencia, carrera hacia la productividad elevada a la enésima potencia, vitaminas, algo de deporte.

Para Carl Honoré, este cóctel parecía no funcionar, tal y como explica al inicio de Elogio de la lentitud, obra que acompaña al autor en la búsqueda de las voces críticas al ritmo actual de la vida de un ciudadano cada vez más urbano, económicamente solvente y educado.

Eso sí, un ciudadano, a menudo también profesional liberal reputado -es el caso de Honoré, en contacto con una cultura liberal y cosmopolita desde su infancia-, que no tiene tiempo para disfrutar de sus supuestas riquezas, traducidas en bienes y capacidad de compra, quizá con un toquecito de filantropía y “buena ciudadanía”.

Estas riquezas deberían repercutir sobre lo que hemos llamado eufemísticamente como “calidad de vida”, aunque a algunas personas no les salen las cuentas.

Ni conversiones a ideologías orientales ni vuelta a la ideología ludita: tempo giusto

En su búsqueda de modos alternativos de sacar partido a nuestra vida personal en la llamada “era de la velocidad”, Honoré confecciona una primera mirada de gran alcance a los movimientos defensores de la lentitud que se abren paso en ciudades, oficinas, fábricas, barrios, cocinas, hospitales, salas de concierto, dormitorios, gimnasios y escuelas.

Slow Movement, Slow Food y Città Slow son sólo algunas muestras de este creciente interés de personas en todo el mundo por reflexionar acerca de la cultura de “hacer más cosas por minuto, por hora, cada día”. Un anhelo inalcanzable de la productividad absoluta.

Como advierte la contraportada del propio libro en su edición en castellano (RBA, 2005; traducción de Jordi Fibla), “no espere el lector encontrar en estas páginas llamadas al estilo de los luditas (trabajadores del siglo XIX que se organizaban para destruir las máquinas), incitaciones a destruir la tecnología y a buscar la utopía preindustrial. Esta es una revolución moderna, apoyada por amantes de la cordura que usan teléfonos móviles y el correo electrónico.”

La filosofía de la lentitud, prosigue el libro de Honoré, puede resumirse en una palabra: equilibrio. Las personas pueden descubrir energía y eficiencia allí donde quizá menos las habían esperado: en el hacer las cosas más despacio.

Elogio de la lentitud no es una narración espectacular, llena de chocantes descubrimientos o explicaciones de teorías conspirativas del “Estado” o del “sistema”; o, claro, del “capitalismo”.

No es un panfleto exaltado con una portada naranja que, más que sugerir, exclame un “¡Cómprame! Yo soy el libro de auto-ayuda absoluto, el libro que te va a recomponer la existencia”. No hay que temer por el tufillo a incienso, inexistente en este caso.

No obstante, su sencillez y el oficio bien aprendido del autor dejan un bouquet prolongado y tranquilo; en este caso, totalmente perceptible por cualquiera: no es necesario acudir a ningún cursillo ni Honoré invita a nadie a hacerse anacoreta.

Ficha técnica de la edición en castellano

• Título: Elogio de la lentitud: un movimiento mundial desafía el culto a la velocidad
• Autor: Carl Honoré
• Editorial: RBA
• Género: Ensayo
• Páginas: 254
• Año: 2005